Hoy en día las energías más usadas son las energías no renovables, es decir, aquellas que se consiguen gracias a los recursos del planeta. Los recursos fósiles como el carbón, el gas natural o el petróleo son las principales fuentes de energía que usa el ser humano. Sin embargo, existen otro tipo de energías que cada vez están ganando más terreno, una de ellas es la energía fotovoltaica. Hoy vamos a explicarte cómo se produce este tipo de energía y cómo beneficia al planeta y al medio ambiente ¡Atento!
¿Qué es la energía fotovoltaica?
La energía fotovoltaica es aquella que aprovecha la radiación de los rayos del sol para producir energía eléctrica. Es una energía renovable limpia, que se consigue a través de una fuente de energía inagotable, como es el sol.
¿Cómo se produce la energía fotovoltaica?
La energía solar fotovoltaica se basa en el principio de que la energía contenida en las partículas de luz (los fotones) puede ser convertida en electricidad. Esto se logra a través del denominado proceso de conversión fotovoltaica. La conversión directa de energía solar en electricidad se realiza a través de un material semiconductor (silicio, por ejemplo). No requiere partes móviles, combustible ni ruido. El elemento básico es la célula fotovoltaica: expuesta a la luz, absorbe la energía de los fotones de luz. Estos ponen en movimiento electrones que son atrapados por un campo eléctrico interno. Los electrones recogidos en la superficie de la celda generan una corriente eléctrica continua.
Aun conociendo todas sus ventajas y siendo una energía que cuida el medio ambiente, su implantación aún es lenta. Queda camino por recorrer para terminar de usar los recursos fósiles y empezar a utilizar las energías renovables. Mientras el planeta, está sufriendo gracias a los intereses económicos de muchos.